Sí, ya que provoca los efectos que se observan en todas sustancias estupefacientes:

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1. Afectan al sistema nervioso: el alcohol etílico o etanol es una droga depresora del cerebro que hace que éste disminuya su funcionamiento.

2. Crean dependencia: el alcohol es una potente droga que si se consume en exceso y con frecuencia genera una fuerte dependencia, tanto física como psicológica. Cuando una persona depende del alcohol tiene que seguir consumiéndolo para evitar el intenso malestar que le provoca el síndrome de abstinencia, que son unos síntomas muy desagradables que pueden llegar al delirium tremens.

3. Crean tolerancia: además, los alcohólicos necesitan consumir cada vez más alcohol para experimentar los mismos efectos, a este fenómeno se le llama tolerancia.